La situación de vulnerabilidad de las mujeres y niñas en Guatemala, en un contexto de violencia generalizada que se manifiesta dentro y fuera del hogar, se refleja en estudios y estadísticas elaborados según los últimos registros oficiales. En 2018, un total de 59.102 mujeres y niñas denunciaron haber sido víctimas de violencia machista, siendo esta cifra más del doble del número registrado en el año 2010 (29.004). La mitad de los casos, además, fueron registrados en tan solo cinco departamentos, entre los que se encuentran Escuintla y Suchitepéquez. Ese mismo año, 763 mujeres fueron asesinadas por hombres, homicidios que implican directamente a mujeres jóvenes (18-40 años), englobando el 62% de víctimas mortales.
Cabe mencionar la existencia de otras manifestaciones de violencia no denunciadas (misoginia, prácticas machistas, discriminaciones sexistas, etc.), propias de una estructura de orden patriarcal, que incluyen además una crueldad excesiva, la revictimización e, incluso, la criminalización de algunas sobrevivientes. Las brechas existentes por motivos de género limitan la participación de las mujeres y coartan sus libertades, dándose situaciones de desigualdad a nivel laboral, económico y social que son limitantes del ejercicio pleno de sus derechos.
Teniendo en cuenta este contexto de violencia hacia la mujer y su constante discriminación en el marco socioeconómico del país, y siguiendo una de sus principales líneas de actuación en cooperación, la Fundación CIDEAL apoya el desarrollo y protección de los derechos de las mujeres y niñas a través de un proyecto de dos años de duración, financiado por la AECID, y ejecutado por una contraparte local de gran recorrido y trascendencia en el país, el Grupo Guatemalteco de Mujeres (GGM).
Las brechas existentes por motivos de género limitan la participación de las mujeres y coartan sus libertades, dándose situaciones de desigualdad a nivel laboral, económico y social que son limitantes del ejercicio pleno de sus derechos.
Esta colaboración, contribuye a la sostenibilidad de los CAIMUS (Centros de Atención Integral para Mujeres Sobrevivientes) de Escuintla y Suchitepéquez y al apoyo a las tareas de asistencia general que se realizan en los mismos, y que en este 2019 han cubierto las necesidades de 2.500 mujeres en estos departamentos. En sintonía, una de las acciones logradas más destacables es la sistematización y digitalización del Modelo de Atención Integral desarrollado por GGM durante toda su trayectoria de atención a mujeres, así como la traducción del mismo en Protocolos Generales de Actuación comunes a todos los CAIMUS a nivel nacional en Guatemala, con la intención de garantizar la mejor calidad en el servicio.
Formación para el emprendimiento
Además, en el marco de este proyecto se trabaja de manera complementaria para paliar la dependencia económica de las mujeres, y la violencia que su entorno ejerce sobre ellas con motivo de esta dependencia. En este sentido, se han puesto en marcha acciones para favorecer el empoderamiento y la autonomía económica, factores clave para que las mujeres puedan hacer efectivos sus derechos fundamentales y lograr una vida libre de violencias machistas. En esta línea, el proyecto contribuye también a la formación económica de grupos de mujeres atendidas en los CAIMUS de Escuintla y Suchitepéquez en temas como desarrollo de emprendedurías, creación de cooperativas, gestión de recursos y búsqueda de empleo, con el objetivo de potenciar el emprendimiento, la independencia económica y la autoestima de las mujeres.
Asimismo, se creará un servicio de orientación laboral permanente dentro de los CAIMUS, fundamental para guiar y acompañar a las mujeres en sus procesos de inserción profesional.
