En 2012, en un contexto marcado por la violencia, grupos insurgente tomaron el control de la ciudad de Tombuctú, en el norte de Mali. Una de las acciones que estos grupos llevaron a cabo fue la destrucción y el saqueo de ciertos monumentos históricos y religiosos en la ciudad, como la puerta sagrada de la mezquita de Sidi Yehia en Tombuctú.
Esta situación fue remitida por el gobierno de Mali a la Corte Penal Internacional (CPI), para que estos ataques fuesen juzgados como crímenes de guerra. En agosto de 2017 la CPI dictó una orden de reparación constatando que estos hechos causaron daños morales y económicos a la población maliense, poniendo en marcha el Fondo Fiduciario para las Víctimas. Como parte del mismo, CIDEAL ejecuta un proyecto en colaboración con la UNESCO y CFOGRAD (Centro de Formación, Gobernanza e Investigación Aplicada al Desarrollo), orientado a la reparación de dichos daños
En este marco, CIDEAL participó el pasado 14 de diciembre en el comité directivo a cargo de coordinar y dar seguimiento a las medidas de reparación colectiva tomadas en el marco del proyecto, del que formamos parte.
Son muchos años los que CIDEAL lleva trabajando en Mali, abordando diversas problemáticas sufridas por el país, lo que hace de nosotros un socio clave para la correcta implementación de las medidas necesarias para resarcir a las víctimas.
