El fenómeno de la radicalización violenta, que afecta de manera particular a la juventud, es una realidad de gran transversalidad que guarda fuertes vínculos con algunos de los principales desafíos que afronta el mundo actual. Se trata además de una problemática compartida, presente en diversas sociedades, culturas y países. Todo ello conduce a la necesidad de abordar este tema desde un enfoque pluridimensional, tomando en consideración las múltiples cuestiones en liza.
Con el fin de propiciar un espacio para la reflexión y el debate en torno a este tema, la Fundación CIDEAL y Casa Árabe organizaron el pasado 3 de diciembre, con el apoyo de la AECID, el seminario “Juventud y prevención de la radicalización en Marruecos”. El encuentro sirvió para aportar elementos que contribuyen a una mejor comprensión de los procesos de radicalización y los modos de prevenirlos, para lo que se analizaron distintas experiencias de interés desarrolladas en este ámbito.
La cooperación internacional para el desarrollo tiene un importante papel que jugar al respecto. De hecho, algunos indicadores apuntan a la pobreza como el principal factor que empuja hacia la radicalización en países como Marruecos, lo que pone de manifiesto la importancia de poner en marcha estrategias de prevención desde un enfoque más social, trabajando en ámbitos como la integración comunitaria, la inserción sociolaboral, la formación y el fortalecimiento de la sociedad civil.
En esta línea se inscribe el Convenio Shabab Mutasamih (“Juventud tolerante”), que lleva a cabo la Fundación CIDEAL en Marruecos, con el apoyo financiero de la AECID.
